July 26, 2012

April 20, 2012

Un hombre se sentó en una estación de metro en Washington DC y comenzó a tocar el violín, era una fría mañana de enero. Jugó seis piezas de Bach durante unos.. 45 minutos. Durante ese tiempo, ya que era hora punta, se calcula que 1.100 personas pasaron por la estación, la mayoría de ellos, en su camino al trabajo.

Tres minutos pasaron, y un hombre de mediana edad se dio cuenta de que había un músico que tocaba. Se aminoró el paso y se detuvo por unos segundos, y luego se apresuró a cumplir con su horario.

Un minuto más tarde, el violinista recibió su primer dólar de propina: una mujer arrojó el dinero en la caja y sin parar, siguió caminando.

Unos minutos más tarde, alguien se apoyó contra la pared a escucharle, pero el hombre miró su reloj y comenzó a caminar de nuevo. Es evidente que se le hizo tarde para el trabajo.

El que paga la mayor atención fue un niño de 3 años. Su madre se apresuró, pero el chico se detuvo a mirar al violinista. Por último, la madre empuja duro, y el niño siguió caminando, volviendo la cabeza todo el tiempo. Esta acción fue repetida por varios otros niños. Todos los padres, sin excepción, los forzaron a seguir adelante.

En los 45 minutos que el músico tocó, solo 6 personas se detuvieron y permanecieron por un tiempo. Alrededor del 20% le dieron dinero, pero siguieron caminando a su ritmo normal. Recaudó $32. Cuando terminó de tocar y el silencio se hizo, nadie se dio cuenta. Nadie aplaudió, ni hubo reconocimiento alguno.

Nadie lo sabía, pero el violinista era Joshua Bell, uno de los músicos más talentosos del mundo. Él había jugado sólo una de las piezas más complejas jamás escritas, en un violín por valor de 3,5 millones de dólares.

Dos días antes de tocar en el metro, Joshua Bell agotó un teatro en Boston, donde los asientos oscilaban los $100.

Esta es una historia real. Joshua Bell tocando de incógnito en la estación de metro, fue organizada por el diario The Washington Post como parte de un experimento social sobre la percepción, el gusto y las prioridades de las personas. Las líneas generales fueron las siguientes: en un entorno común a una hora inapropiada, ¿percibimos la belleza? ¿nos detenemos a apreciarla?

La conclusión de esto es, que si no tenemos un momento para detenernos y escuchar a uno de los mejores músicos del mundo tocando la mejor música jamás escrita, ¿cuántas cosas nos estamos perdiendo?

April 10, 2012

te lo prometo

February 12, 2012

present

He estado pensando en las veces que he escuchado la frase "me gustaría tener una maquina del tiempo", si me diesen un puñetazo por cada vez que he oído esa frase.. probablemente no me quedarían dientes para sonreír.
Nos empeñamos en querer cambiar aquello que hicimos mal, o lo que es peor, lo que no llegamos ha hacer. Ese trabajo que dejamos ir, ese beso que no dimos, ese orgullo que no tragamos y por el cual ahora queremos dicha maquina. ¿queréis una maquina del tiempo?
ya la tenéis!
No sirve para volver al pasado y hablar con alguien que ya no esta, o para volver a rectificar aquello que hicimos mal, pero si que sirve para no arrepentirnos dentro de unos años de lo que no estamos haciendo "ahora ".
El tiempo corre, y el que esta atrás, esta perdido, tan solo es un recuerdo, como una fotografía en uno de esos álbumes que guardan nuestros padres. Lo que yo te propongo, es que empieces a hacer "ahora" todo eso que dentro de un tiempo, puedes arrepentirte de no haberlo echo, los errores no se borran, pero tienen remedio... decide hoy, lo que vas a querer mañana.
la vida es un regalo, por eso se llama presente*

January 09, 2012

love actually

Siempre que me siento pesimista por como esta el mundo, pienso en la puerta de llegadas del aeropuerto de Heathrow. La opinión general da a entender que vivimos en un mundo de odio y egoísmo, pero yo no lo entiendo así. A mí me parece que el amor está en todas partes, a menudo no es especialmente decoroso ni tiene interés periodístico, pero siempre está ahí. Padres e hijos, madres e hijas, maridos y esposas, novios, novias, viejos amigos...
Cuando los aviones se estrellaron contra las torres gemelas que yo sepa ninguna de las llamadas telefónicas de los que estaban a punto de morir fue de odio y venganza, todas fueron mensajes de amor. Si lo buscáis, tengo la extraña sensación de que descubriréis que el amor en realidad, está en todas partes.

December 21, 2011

smile


porque todas las fotos que tengo tuyas sales sonriendo